El camino azul hacia la resiliencia de los proveedores: cómo los ríos saludables y el acceso al agua potable son fundamentales para la recuperación del COVID-19 para el sector de la confección

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Image: WaterAid/HSBC/ DIRK/ Parvez Ahmad

Las vías fluviales saludables y el acceso sostenible al agua, el saneamiento y la higiene (WASH) son la clave para la resiliencia de las empresas de confección de prendas de vestir y sus cadenas de suministro ante crisis actuales y futuras, incluida la pandemia de COVID-19 y el cambio climático. Alexis Morgan, de WWF (Fondo Mundial para la Naturaleza), y Ruth Romer, de WaterAid, destacan los peligros de no proteger los ríos y el acceso de los trabajadores a servicios de WASH, y las medidas prácticas que las empresas pueden tomar para aumentar su resiliencia y unirse al movimiento por la moda sostenible.

La industria de la moda —que abarca los sectores textil y de las prendas de vestir— es una de las más grandes en términos de ingresos anuales y aporta empleo y beneficios a millones de personas. Al mismo tiempo, los materiales y procesos de producción que emplea generan numerosos impactos globales negativos en las personas y el planeta. La pandemia de COVID-19 no solo ha puesto de manifiesto las deficiencias ambientales y sociales del sector, que deben abordarse urgentemente, sino que también ha destacado la importancia de la resiliencia de los proveedores.

El acceso a servicios de WASH es la base de la salud y el bienestar, una realidad que quedó claramente expuesta por una crisis sanitaria mundial en la que lavarse las manos con agua y jabón es una primera línea de defensa. La interrupción inmediata de las actividades de confección al inicio del COVID-19 para proteger la salud de la fuerza laboral demuestra el papel fundamental que desempeñan los servicios de WASH en la sostenibilidad de las cadenas de suministro centradas en las personas. Desde entonces, los riesgos significativos para la salud, la seguridad y las condiciones laborales de los trabajadores (predominantemente mujeres) han catapultado el carácter prioritario de los servicios de WASH a nivel directivo, pero, con un acceso insuficiente al agua, y la consiguiente merma en el hábito de lavarse las manos, proteger la salud de los trabajadores sigue siendo un reto.

La Carta Abierta al sector, iniciada por el WWF, es un llamado oportuno, poderoso y colectivo a la acción en materia de sostenibilidad en el sector textil y de la confección de prendas de vestir, al que WaterAid se une con orgullo. Como hemos visto durante la pandemia, la resiliencia del sector depende en gran medida de la salud de sus trabajadores, lo que hace que los compromisos tangibles con las medidas de WASH sean cruciales para las operaciones y el crecimiento futuro.

La falta de acceso a servicios de WASH en el campo, en las fábricas y en la comunidad local socava considerablemente la salud de los empleados, lo cual deriva en un aumento en la tasa de absentismo y una disminución de la productividad. La continuidad operativa del sector de la confección de prendas de vestir requiere disponibilidad de agua tanto para el desarrollo de productos como para el bienestar de la mano de obra; de ahí la importancia del riesgo que enfrentan las empresas en materia de carencia de servicios de WASH. Lamentablemente, con demasiada frecuencia las empresas no dan suficiente prioridad a este aspecto, lo cual las deja expuestas a este riesgo continuo propio de la cadena de suministro.

Los trabajadores de una fábrica de ropa confeccionada se lavan las manos para evitar el COVID-19 tras aprender acerca de la importancia del lavado de manos mediante una capacitación en el comportamiento sobre higiene. Narayanganj, Bangladesh.
Los trabajadores de una fábrica de ropa confeccionada se lavan las manos para evitar el COVID-19 tras aprender acerca de la importancia del lavado de manos mediante una capacitación en el comportamiento sobre higiene. Narayanganj, Bangladesh.
Image: WaterAid/HSBC/ DIRK/ Parvez Ahmad

Una amenaza para la resiliencia a largo plazo

Mirando más allá del COVID-19, el fortalecimiento de la resiliencia frente a la próxima crisis requiere medidas urgentes para preservar y proteger los ecosistemas acuáticos y garantizar el acceso universal a los servicios de WASH.

Los brotes de enfermedades (especialmente las transmitidas por el agua) se relacionan más comúnmente con la combinación de una degradación de los ecosistemas y problemas relacionados con los servicios de WASH. Elcambio climático está causando estragos en el agua y, por lo tanto, en el acceso a los servicios de WASH: el aumento del nivel del mar contamina el agua dulce con sal; las sequías y las inundaciones son cada vez más comunes; y las aguas superficiales se evaporan a temperaturas más cálidas. Simultáneamente, se prevé que la demanda mundial de agua aumente hasta un 30 % para 2050. La evaluación de diferentes escenarios de riesgos hídricos, junto con la gestión integrada de este valioso recurso, debe estar a la vanguardia de las estrategias de sostenibilidad corporativa a medida que la competencia se intensifica.

Un enfoque holístico de la administración del agua que priorice mutuamente los ecosistemas, la salud de la comunidad y las necesidades operacionales, en última instancia, sustentará y producirá éxito comercial. Los ríos sanos y el acceso fiable al agua potable son la línea vital conjunta de las personas, el planeta y las empresas.

Soluciones innovadoras en materia de agua y medidas sostenibles de WASH en acción

En Bangladesh, WaterAid, con el apoyo de HSBC, trabaja con fábricas de prendas de vestir preconfeccionadas para implementar soluciones innovadoras a la creciente competencia por el acceso al agua potable de las comunidades y la industria, al tiempo que atiende la preocupación por las tasas de extracción de agua subterránea en un entorno que sufre estrés hídrico.

Para reducir la dependencia en las aguas subterráneas en una central de confección de prendas de tejido de punto, WaterAid apoyó la instalación de un sistema de captación de aguas de lluvia, que ha reducido directamente el consumo de aguas subterráneas en un 20 % hasta la fecha. El agua recolectada es de calidad suficientemente buena para ser utilizada en los procesos de lavado y teñido, y también puede utilizarse como agua gris en inodoros. Antes, se necesitaban 160 litros de agua por cada 1 kg de mezclilla durante el proceso de teñido; ahora, esa cifra ha descendido a 120 litros. El sistema de embalses satisfacer las necesidades de confección durante aproximadamente cuatro meses, protege el negocio en un clima cambiante y ha disminuido tanto el impacto ambiental como los costos operativos.

La mejora de las instalaciones de WASH, y la promoción periódica de la higiene entre los trabajadores y las comunidades aledañas también han mejorado la productividad, reducido el ausentismo, y motivado y unido a los empleados, según Maher Abdullah Al, director ejecutivo y jefe de negocios de la fábrica. La implementación sólida de prácticas de WASH permitieron a la fábrica responder rápida y adecuadamente a la crisis de COVID-19 con la orientación y el apoyo de WaterAid Bangladesh. Las medidas de respuesta al COVID-19, tales como estaciones adicionales de lavado de manos y letreros que promueven la higiene en la fábrica, contribuyeron a un regreso seguro al trabajo de los empleados y a la continuidad operativa de la fábrica y las marcas a las que provee.

El valor de la administración integral del agua es claro: las empresas revolucionarias que consideran tanto su sostenibilidad hídrica para las operaciones como las necesidades del planeta y las personas, están bien situadas para responder a las crisis y asegurar resiliencia a largo plazo.

 Los trabajadores de una fábrica de ropa confeccionada se lavan las manos para evitar el COVID-19 al haber aprendido acerca de la importancia del lavado de manos a través de la capacitación sobre el comportamiento de higiene. Narayanganj, Bangladesh. 2020
Los trabajadores de una fábrica de ropa confeccionada se lavan las manos para evitar el COVID-19 al haber aprendido acerca de la importancia del lavado de manos a través de la capacitación sobre el comportamiento de higiene. Narayanganj, Bangladesh. 2020
Image: WaterAid/Drik/Parvez Ahmad

Valorando nuestros ríos y acceso sostenible al agua

Los sistemas fluviales nos proporcionan agua para beber, y para las operaciones y necesidades comerciales, pero su gestión es fundamental para el funcionamiento del ecosistema y para amortiguar el impacto del cambio climático: sequías e inundaciones. En particular, los ríos que fluyen libremente dan cabida a deltas y manglares que protegen las costas. Mantienen las pesquerías y los bosques (que proporcionan proteínas y recursos críticos para muchas comunidades de trabajadores en el sector de las prendas de vestir), proporcionan agua y respaldan la agricultura en terrenos inundables para cultivar alimentos, apoyando así a millones de personas. Por lo tanto, existe una necesidad imperiosa de valorar nuestros ríos y sus deltas, ya que son básicos para proporcionar resiliencia económica a muchos sectores, incluido el sector de las prendas de vestir.

Desde 1970, las especies de agua dulce han disminuido en un 84 %, lo que indica que hemos minado estos sistemas y nos hemos puesto en riesgo. Al igual que muchas ciudades, los centros de ropa se concentran a lo largo y alrededor de los ríos y sus deltas (por ejemplo, Dhaka en el delta Ganges-Brahmaputra, Suzhou en el delta del Yangtze, Ho Chi Minh en el delta del Mekong), lo que significa que el sector, tanto tiene un impacto como depende de la biodiversidad y el funcionamiento de los ecosistemas fluviales. Durante las últimas décadas, WWF ha trabajado extensamente en muchas de estas valiosas áreas delta, lo cual ha derivado en diversos compromisos exitosos que vinculan a los proveedores de prendas de vestir con los ecosistemas de aguas arriba.

Garantizar el servicio de WASH no es solo cuestión de instalar llaves y retretes en las instalaciones, sino también de garantizar que el agua fluya de los ecosistemas de cabeceras de arroyos y traiga consigo sedimentos críticos que evitan la salinización del agua potable de la comunidad. El WWF continúa promoviendo proyectos en toda Asia través de nuestra iniciativa Deltas Asiáticas Resilientes, y trabaja para asegurar que comunidades y especies prosperen gracias a la restauración de los humedales dentro de nuestra iniciativa de Rutas migratorias asiáticas. Al movilizar financiación a varios niveles (por ejemplo, a través de Bankable Nature Solutions), podemos mejorar la resiliencia de las cuencas, crear negocios más fuertes y ayudar a las comunidades. En resumen: si queremos mejorar la resiliencia de la cadena de suministro de prendas de vestir y proporcionar WASH a los trabajadores y otras personas beneficiadas, los ecosistemas fluviales forman parte fundamental de una estrategia de resiliencia para el sector.

Un sitio a lo largo del río Ramganga en Moradabad, India, que forma parte del Programa Ríos por la Vida, Vida para los Ríos de la WWF, que cuenta con el apoyo del Programa del Agua de HSBC, diciembre de 2018.
Un sitio a lo largo del río Ramganga en Moradabad, India, que forma parte del Programa Ríos por la Vida, Vida para los Ríos de la WWF, que cuenta con el apoyo del Programa del Agua de HSBC, diciembre de 2018.
Image: WaterAid/ Sharbendu De

Medidas a corto plazo y soluciones a largo plazo

Un informe reciente — ¿Existe la sostenibilidad en la moda? — pone de relieve la necesidad de intensificar los esfuerzos de sostenibilidad en todo el sector para asegurar que emerja más fuerte tras la pandemia del COVID-19. Para generar resiliencia futura, las medidas inmediatas deben ir acompañadas de compromisos progresistas a fin de encontrar soluciones a largo plazo.

Se plantean dos recomendaciones centrales para el sector:

  1. Gestionar las cuestiones ambientales y sociales de una manera integrada: garantizar ecosistemas saludables y activos que no solo aumenten la resiliencia y encaren los impactos climáticos, sino que también sustenten agua limpia y salubre, para satisfacer las necesidades operacionales y de la fuerza de trabajo. En este sentido, las empresas deberán adoptar infraestructura verde (sostenible) e infraestructura gris (convencional, como plantas de tratamiento de aguas residuales o plantas de filtración de aguas) a medida que miramos hacia el futuro.
     
  2. Renovar los modelos de negocio del sector de las prendas de vestir para alinearse con las demandas emergentes de los consumidores: es necesario avanzar en las áreas de reutilización, reciclaje, economía circular y calidad del agua para que este sector se ajuste a otros. Las mejoras lineales pueden funcionar con los modelos actuales, pero, para hacer mejoras exponenciales, los nuevos modelos pueden ser el mejor camino. Dadas las crecientes señales por parte de la próxima generación de consumidores de que la sostenibilidad es fundamental, nunca ha habido un mejor momento para analizar nuevos modelos a fin de mejorar la sostenibilidad.

Medidas prácticas necesarias para aplicar las recomendaciones:

  1. Cuestione sin piedad su estrategia de sostenibilidad actual.
  2. Establezca contacto con expertos (WaterAid y WWF ); siga las guías (CEO Water Mandate y Esquema comercial ante el COVID-19 de WaterAid; Guía de producción más limpia de WWF para el sector textil (PDF) ; Conservación del agua dulce y Agua, Saneamiento e Higiene: directrices integradas (PDF)); únase a coaliciones (WASH4Work, Business4Nature), firme la carta abiertay comprométase con medidas tangibles.
  3. Realice inversiones en:
  • Tecnologías en campos y fábricas que mejoren los aspectos relacionados con el agua (calidad, cantidad, servicios de WASH y ecosistemas).
  • Concienciación en materia de agua, saneamiento e higiene e infraestructura para trabajadores y comunidades aledañas.
  • Actividades holísticas de gestión hídrica de cuencas fluviales que abarquen soluciones basadas en la naturaleza y ayuden a fortalecer la gobernanza del agua.

Lograr la resiliencia requiere una mentalidad enfocada en ecosistemas —personas, planeta, utilidades— y, del mismo modo, nadie puede hacerlo solo. La acción colectiva, entre sectores e industrias, es la clave para liberar el potencial universal.

Alexis Morgan es responsable global de Administración del Agua en WWF. Sígalo en Twitter en @alexisjmorgan. Ruth Romer es asesora sénior del sector privado en WaterAid. Sígala en Twitter en @ruthromer4.