La visión de WaterAid es un mundo donde las personas que enfrentan la pobreza y la marginación tengan acceso a agua, saneamiento e higiene sostenibles y seguros (WASH).
Nuestro objetivo es lograr esto fortaleciendo los sistemas WASH sustentados en principios de derechos humanos. Los sistemas WASH están conformados por:
- actores (personas e instituciones)
- factores (sociales, económicos, políticos, ambientales, tecnológicos)
- interacciones
El fortalecimiento del sistema es un proceso de análisis, implementación, adaptación y aprendizaje, realizado con el entendimiento de que el acceso inclusivo y sostenible a WASH es el resultado de interacciones entre múltiples actores (personas e instituciones) y factores (sociales, económicos, políticos, ambientales, tecnológicos) en un sistema dinámico y complejo. Para fortalecer los sistemas WASH, trabajamos a nivel local, nacional y global, y utilizamos una variedad de tácticas.
Cómo trabajamos
Análisis, generación de evidencia e investigación
Nuestra primera tarea es entender el problema e identificar dónde tenemos las mejores posibilidades de generar cambios. Trabajamos con comunidades e instituciones locales para identificar las barreras que enfrentan las personas para acceder a un servicio WASH sostenible y seguro. También realizamos investigaciones para reunir la evidencia necesaria para abogar por mejoras en los sistemas WASH.
Alianzas
No podemos abordar las barreras que enfrentan las personas para acceder a sistemas WASH sostenibles y seguros. Por lo tanto, trabajamos con:
- instituciones y comunidades locales
- gobiernos locales y nacionales
- la sociedad civil y las organizaciones no gubernamentales
- institutos académicos y de investigación
- el sector privado
Para que nuestro trabajo sea lo más efectivo posible, también compartimos las mejores prácticas y las lecciones que hemos aprendido con otros, y reunimos a diferentes instituciones para incrementar sus compromisos con la mejora de WASH.
Prestación de servicios y cambio de comportamiento
Prestamos servicios WASH que son inclusivos, promovemos el cambio de comportamiento en materia de higiene y demostramos cómo WASH puede mantenerse y expandirse. También apoyamos a comunidades e instituciones locales para que sus instalaciones de WASH sean más resilientes al cambio climático y mejoren la seguridad hídrica y la gestión de los recursos hídricos.
Fortalecimiento institucional y capacitación
Fortalecemos las habilidades y conocimientos de los proveedores de servicios y gobiernos locales para cumplir con sus roles y responsabilidades. Apoyamos a las instituciones locales para planificar, financiar y monitorear mejor el desempeño de los servicios WASH. Fortalecemos las relaciones entre los proveedores de servicios y sus consumidores para asegurarnos de que los proveedores respondan y sean responsables. También promovemos la participación y liderazgo de las mujeres en la toma de decisiones en torno a WASH.
Empoderamiento de la comunidad
Es crucial que las comunidades estén empoderadas, y puedan hacerse cargo de sus instalaciones y servicios WASH. Para apoyar esto, pretendemos amplificar las voces de la población local, empoderando a las comunidades para que accedan a información sobre WASH y exijan sus derechos humanos al agua y al saneamiento.
Incidencia política y campañas
Usamos todas estas experiencias e investigaciones para elevar el perfil de WASH en espacios de desarrollo regional y global, como la Asamblea Mundial de la Salud y la COP26, y abogamos por el cambio de políticas, la reforma del sector y la mejora del financiamiento para WASH.
Aprendizaje y adaptación
Regularmente, reflexionamos sobre los avances que hemos logrado, las lecciones que hemos aprendido y el contexto cambiante. Utilizamos esta información para adaptar y mejorar lo que hacemos.
¿Qué desafíos enfrentamos?
Trabajamos en países donde las instituciones permanentes encargadas de prestar estos servicios no cuentan con suficiente personal ni dinero, ni rinden cuentas a todos los sectores de la población. Los procesos de planeación, monitoreo y presupuesto dirigidos por el gobierno pueden ser débiles con financiamiento insuficiente asignado al mantenimiento importante, cambio de comportamiento y finalización de la cadena de saneamiento. Las dinámicas de poder profundamente arraigadas, así como las normas sociales y de género también pueden socavar el progreso.
A menudo, existen barreras que impiden que el sector privado se involucre, particularmente en las zonas rurales. WASH no se integra sistemáticamente como parte del financiamiento para la adaptación al clima y, en general, no cuenta con fondos en comparación con otros derechos humanos, como la salud y la educación. La sustentabilidad, escalabilidad e inclusividad de los servicios WASH se ven amenazadas por todas estas debilidades en el sistema.
Creemos que al trabajar juntos para fortalecer los sistemas de agua, saneamiento e higiene, podemos lograr nuestra misión y ayudar a comunidades enteras a sacar su potencial, liberarse de la pobreza y cambiar sus vidas para siempre.
Imagen superior: Fasika, 15 años, recolecta agua en su pueblo en Gojjam Occidental; Etiopía, julio de 2019.