No más excusas: los gobiernos pueden resolver la crisis de higiene en la atención médica global para 2030
Antes de la Asamblea Mundial de la Salud de este año, Annie Msosa y Julie Henri destacan los compromisos que los gobiernos deben asumir para resolver la crisis mundial de mala higiene en los centros de salud.
“Ha llegado a una zona limpia”. El mensaje da la bienvenida a los visitantes del centro de salud Nkhuzi en Ntchisi, Malaui.
Cuando uno recorre el lugar, queda claro que la buena higiene se toma en serio en cada esquina del centro.
Los terrenos están bien mantenidos y las áreas están designadas para desechos médicos y de otro tipo. Las instalaciones para lavarse las manos con agua y jabón están disponibles en puntos clave: donde se brinda atención, baños exteriores y la clínica. Aquellos que buscan atención son informados de las instalaciones de higiene disponibles y constantemente se les recuerda que las usen correctamente.
También hay un refugio, donde las embarazadas que viven lejos del centro de atención médica pueden quedarse desde al menos un mes antes de su fecha de parto. El refugio en el centro Nkhuzi tiene un número adecuado de baños, inodoros e instalaciones para lavarse las manos. Se puede decir fácilmente que a las mujeres les gusta esperar aquí ,porque asumen la responsabilidad de mantener todo tan limpio como lo encontraron.
Sin agua, saneamiento e higiene, las mujeres se sentían inseguras
Sin embargo, todo esto es una gran diferencia con respecto a hace unos años. En ese entonces, el refugio carecía de instalaciones de agua, saneamiento e higiene (WASH) y las mujeres embarazadas se sentían más seguras en casa (donde estaban disponibles estos elementos esenciales) que venir al refugio a esperar hasta el parto.
Esta fue una elección difícil y peligrosa para las mujeres: mientras buscaban proteger a sus hijos por nacer y a ellas mismas de las infecciones, podían entrar en el refugio y en la sala de maternidad sucios; al quedarse en casa, era posible que no llegaran a tiempo al centro de atención médica para dar a luz, lo que aún representaba riesgos para su vida y la de sus hijos. “Incluso para nosotros, no tenía sentido recomendar a las mujeres a venir y quedarse en el refugio donde su estadía sería muy deficiente. Entonces, el impacto de no tener agua potable tuvo consecuencias mucho peores”, dijo Zelifa Mzoma, enfermera partera.
Los servicios de agua, saneamiento e higiene han mejorado la seguridad y la moral
Ahora que las instalaciones cuentan con servicios WASH, el sentido de orgullo y motivación entre los trabajadores de la salud es evidente; se sienten honrados de brindar atención médica segura y de calidad a quienes vienen a las instalaciones.
“Con las manos limpias, puedo hacer mi trabajo y mantener a los bebés y a otros clientes a salvo de infecciones. Hemos visto un gran descenso en los casos de septicemia en los últimos cuatro meses [desde que se crearon las instalaciones]. Esto ha elevado nuestra moral profesional. Tenemos todo lo que necesitamos para hacer bien nuestro trabajo,” dijo Zelifa.
No es solo el personal clínico: los trabajadores de limpieza también se sienten orgullosos del impacto que el ambiente higiénico del centro tiene en los usuarios y la comunidad.
“Los miembros de la comunidad han tomado prestada una hoja de nuestro libro sobre cómo deshacerse adecuadamente de los desechos, que están emulando en sus respectivos hogares. Esto es emocionante para nosotros como defensores de WASH”, dijo Phillimon Kampango, trabajador de limpieza y obrero.
La seguridad, protección y dignidad que la clínica Nkhuzi ofrece ahora a sus usuarios y trabajadores son la base de un servicio de salud de calidad. Y el sentido de comunidad y confianza que se está construyendo en el proceso es inspirador.
Esto es solo un atisbo de lo que es posible si se invierte en los aspectos básicos. A escala global, los efectos serían enormes.
Si los ministros de salud deciden que todos los centros de salud del mundo deben tener servicios de WASH:
- Se salvarán 1.4 millones de vidas de recién nacidos y madres
- Se prevendrán 7 de cada 10 infecciones adquiridas en hospitales y se reducirán las estancias hospitalarias
- Se reducirán a la mitad los casos de septicemia asociados a la atención de la salud
- Se protegerá y apoyará a los trabajadores de la salud para que hagan bien su trabajo
- Crecerá la confianza de las comunidades en sus sistemas de salud
- Se reducirá el costo total de la atención médica
¿Qué se requiere para lograr los aspectos básicos de la atención médica?
Una inversión específica de USD 9.6 mil millones hará que WASH esté disponible en todos los centros de atención médica de los 46 países menos desarrollados (PMD) del mundo. Esto es menos de un dólar (USD 0.60) por persona en estos países por año hasta 2030 y representa solo el 3% del gasto actual de salud en los PMD. ¡Esto es menos que el costo de dos barras de jabón en Malaui!
Sin embargo, a nivel mundial, una de cada dos personas acude a un centro de salud o trabaja en uno que no tiene acceso a servicios básicos de higiene. Este problema es más crítico en los países menos desarrollados, donde solo un tercio de los centros de salud tienen acceso a la higiene básica.
Resolver esta crisis no será demasiado costoso y reducirá los costos generales de atención médica; cada dólar gastado en higiene ahorra USD 16 en atención médica. Un compromiso anual de USD 600 millones en financiamiento externo y un compromiso interno de USD 355 millones de los PMD es todo lo que necesitamos en esta década para lograrlo.
No podemos aceptar menos de nuestros líderes de salud. Tienen el poder y los medios para poner fin a esta crisis para siempre.
En la Asamblea Mundial de la Salud, los líderes mundiales de la salud deben comprometerse a poner fin a esta crisis
El último informe de progreso de la Asamblea Mundial de la Salud señala que los países no están avanzando lo suficientemente rápido como para financiar e implementar hojas de ruta para el acceso universal a WASH en los centros de salud.
Asegurar que las personas puedan sobrevivir a la experiencia de los servicios de salud sin ser perjudicadas no es algo que deba debatirse, negociarse o posponerse; debe exigirse. Con ese fin, queremos compromisos de los líderes mundiales de salud para:
- Tomar medidas concretas para cubrir colectivamente la brecha de financiamiento de USD 9.6 mil millones para WASH en centros de salud en los PMD
- Reservar financiamiento para WASH en centros de salud en programas clave del sector de la salud
- Establecer sistemas sólidos de monitoreo y rendición de cuentas para asegurarse de que los gobiernos y los donantes cumplan con sus compromisos
Sabemos que los líderes de salud tienen los recursos para salvar millones de vidas; el mundo está esperando acción. No más excusas.
Imagen superior: Un fregadero roto y en desuso en el centro de salud de Ntaja, Machinga, Malaui, septiembre de 2020.