Liberación de la corriente: financiación eficaz para el agua, el saneamiento y la higiene en África

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Image: WaterAid/Anna Kari

El nuevo informe de WaterAid «Liberando el flujo» se centra en la capacidad de utilizar los fondos disponibles para el agua, el saneamiento y la higiene (WASH) en Etiopía, Mozambique, Ruanda, Sudáfrica y Uganda. John Garrett, Analista Superior de Políticas para Finanzas del Desarrollo de WaterAid, analiza los factores que sugiere el informe son clave para el éxito del sector WASH.

A casi dos mil quinientos millones de personas se les sigue negando el derecho humano al saneamiento, y la meta del Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) para 2015 se ha perdido por un amplio margen. En estas condiciones, es impensable que los fondos disponibles para hacer frente a esta crisis no se utilicen, pero esta es la realidad en muchos países. A pesar de los compromisos y las asignaciones de muchos gobiernos e instituciones financieras, el gasto real a menudo se queda corto y no llega a donde más se necesita. Al comienzo de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible puede haber pocas tareas más urgentes e importantes para la comunidad internacional que eliminar las barreras que impiden el uso efectivo de los recursos en el sector del agua, el saneamiento y la higiene.

El nuevo informe de WaterAid Releasing the Flow, basado en investigaciones de Development Finance International, se concentra en la capacidad de utilizar los fondos disponibles para el agua y el saneamiento en cinco países de África subsahariana: Etiopía, Mozambique, Ruanda, Sudáfrica y Uganda. La investigación sugiere que el liderazgo efectivo del gobierno, a nivel nacional, regional y local, es un factor clave para el éxito. Todos los estudios de caso muestran evidencia de que la sólida voluntad política se ha traducido en acciones positivas sobre la absorción de fondos, una mayor transparencia y mejores servicios de agua y saneamiento. Otros factores críticos incluyen la disponibilidad de recursos humanos calificados, el equilibrio entre el financiamiento ordinario y de inversión para el gobierno local y la calidad de la coordinación y la comunicación entre las principales partes interesadas. 

Habilidades especializadas y financiamiento equilibrado

Los distritos necesitan personal suficiente con las aptitudes técnicas adecuadas para organizar las adquisiciones y las licitaciones, evaluar las ofertas de empresas privadas y gestionar contratos. Se necesitan ingenieros calificados, científicos del agua, técnicos, artesanos, operadores de plantas e inspectores sanitarios para la implementación de los planes y la gestión operativa. La escasez de cualquiera de estos especialistas provoca un cuello de botella en la absorción financiera, la ejecución de proyectos y la gestión sostenible de servicios. Si los gobiernos se descentralizan demasiado rápido, o si no descentralizan los presupuestos necesarios, esto aumenta considerablemente la presión sobre los distritos y su capacidad para ejecutar un servicio eficiente y dinámico. 

El informe muestra que un desequilibrio en el tipo de financiamiento disponible también provoca problemas importantes. Los presupuestos ordinarios bajos (para salarios y actividades operativas) repercuten en la capacidad de los distritos de Etiopía y Uganda para atraer y retener personal de buena calidad, especialmente en las zonas rurales. En Sudáfrica, el número de ingenieros por cada 100,000 personas ha disminuido de 20 en 1994 a tres. La escasez de fondos ordinarios retrasó la inspección y supervisión de los presupuestos de infraestructura en Mozambique, lo que retrasó la liberación de los fondos subsiguientes. El desequilibrio entre los presupuestos ordinarios y los presupuestos de inversión a menudo empeora en los países que dependen de la ayuda por parte de donantes y acreedores que proporcionan su financiamiento casi en su totalidad como inversión.




Coordinación para la absorción

La coordinación entre los gobiernos nacionales y los donantes es especialmente importante para garantizar una elevada tasa de absorción de los fondos de los donantes. Las diferencias en los ejercicios fiscales gubernamentales y de los donantes, como en Ruanda, o en los procesos de gastos y adquisiciones, pueden crear confusión a nivel regional o local. En Etiopía, el Banco Mundial, DfID, el AfDB y UNICEF solían canalizar sus fondos a través de flujos diferentes, cada uno con sus propios requisitos de adquisición y presentación de informes. Las mejoras importantes en la absorción financiera realizadas en el marco del Enfoque Sectorial (SwaP) han armonizado los flujos de financiamiento de donantes y gobiernos, y han reducido la carga del cumplimiento para las regiones y los distritos. 

La Asociación Saneamiento y Agua para Todos ha identificado cuatro formas en que los países en vías de desarrollo y los donantes pueden mejorar la forma en que colaboran y lograr una mayor eficacia en el desarrollo. Estos resultados resuenan mucho con los hallazgos de esta nueva investigación y, de adoptarse, podrían contribuir de manera significativa al uso más eficaz de los fondos disponibles. En un mundo que busca lograr un cambio gradual en el volumen de desarrollo y financiamiento climático, es probable que estos comportamientos resulten críticos para el éxito de la Agenda 2030. Se exponen a continuación:

Mejorar el liderazgo gubernamental de los procesos de planificación sectorial. Fortalecer y utilizar los sistemas nacionales. Utilizar una plataforma de información y rendición de cuentas mutua. Construir estrategias sostenibles de financiamiento del sector del agua y el saneamiento.

John Garret tuitea como @johngarre